Villazón, Bolivia

Inauguramos una nueva sección. La propuesta es buscar fotos de hinchas, escudos, pintadas, banderas, y todo aquel símbolo cuyo significado y significante demuestre amor por la querida insignia a lo largo del universo.
La idea no es irse de vacaciones a Tanganica y sacarse una foto con la del rojo (eso lo hace la revistrucha que reparte Comparada) sino buscar expresiones espontáneas o anónimas del independentismo.
Acá, un homenaje al Rojo y al Bocha en un perdido estadio de Villazón, Bolivia (foto gentileza de Hernán Topasso).

Vale aclarar que cualquier similitud de la cancha altiplánica con el estado actual del Libertadores de América es pura coincidencia.

Because

Porque en los últimos 30 años no ganaste nada
Porque vendés humo
Porque te la das de progre y apoyaste a Duhalde
Porque en tu equipo Óscar Sánchez era titular y el Gaby Milito suplente
Porque no te avivaste que en la misma línea no hay offside desde hace más de 15 años
Porque para vos el “sistema” no sirve
Porque eras del PC en la dictadura
Porque el PC apoyaba a Videla
Porque te la das de amigo de Serrat
Porque Serrat no se la da de amigo de vos
Porque te creés lírico y te fuiste a la Sampdoria por diez pesos más y nos dejaste en banda
Porque te llevaste al paralítico de Matute a la Sampdoria
Porque fracasaste en todos lados
Porque casi nos mandás a la promoción
Porque sos corrupto
Porque cobrás en dólares


Por todo esto:

Te declaramos persona non grata en este blog

He dicho.

Aún hoy nos preguntamos lo mismo

Un minuto de reflexión en la vida de un verdadero hombre de acción.

Algún lector distraído se preguntará: "¿Por que le preguntan eso, si al fin y al cabo ese es su trabajo?"
Resulta que este no era el "Monzón" boxeador.

Noten como aún en medio de una catarata de duras críticas, nuestro héroe tira un gardeliano "cada día juego mejor"...

De yapa, una elegía al gran Pedro Damián, materializada en la letra de "Los miserables":

El hachero

En la cancha una misión,
asfixiar y perseguir al talento y creador,
marca fiera anularlo, no dejarlo respirar, darle duro nada más
en la vida su misión pegar con o sin razón. ¡Sin razón!

Juguemos en el campo, mientras que el lobo está adiestrando
a sus defensas que golpeen sin piedad.

El pensar no es su función, solo sembrar el temor,
entrenado para ser perro de caza y obedecer.
Ordenes recibirá destruir a su rival,
permiso para golpear reprimir y pisotear. ¡Pisotear!

Juguemos en el campo, mientras que el lobo está adiestrando
a sus matones que golpeen sin piedad.

En la cancha sin control, golpear con o sin balón,
corre marca quiébralo, lo ordenó su entrenador,
el talento no es su don, pega pega es tu misión,
en la vida el abusar siempre ha tenido impunidad. ¡Sin piedad!

"Maldición Merengue" o "David y Goliat"

En una caso normal estaríamos obligados a decir que el 22 de Julio de 2003 a un pibe de 22 años se le caía el sueño de su vida, se acababa de enterar que su pase al Real Madrid, el club de los galácticos, el Rey de Copas Europeo, dejaba de tenerlo en cuenta y le cancelaba la contratación debido a "la mala condición de su rodilla derecha".

Un pibe que venía de lograr un campeonato en el Rey de Copas Mundial. No hay muchos que se hayan dado el gusto de jugar en el equipo del que son hinchas, ser capitán, salir Campeón y ser elegido mejor jugador del torneo.Alguien que sabía que la condición de su rodilla derecha era óptima y que no entendía porque se frustraba su ilusión.

Pero la peleó, sacó pecho, mostró lo que muestran los que son distintos, esos tipos que todos quieren en su equipo, los caudillos, los que no se esconden en las malas.Se quedó en España, y desde aquel día no se perdió ningún partido por lesión de aquella rodilla, es capitán, y hasta se dió el gusto de jugar en el equipo con su hermano.

Hoy lo buscan de todos los equipos poderosos de Europa, todos lo quieren llevar, el equipo donde juega dice estar dispuesto a hipotecar el club con tal de no dejarlo ir.

En un caso normal decíamos antes, pero Gabriel Milito demostró que no es un caso normal, por eso no estamos obligados a nada.Aquel día Gabriel Milito demostró estar más allá de un club, demostró que a veces un error de esos marca a un club para siempre, no importa lo grande que sea.

Desde aquel día el Real Madrid sin importar cuanto invierta en contrataciones no gana nada. Algunos ya hablan de "La Maldición Merengue".

No hace falta aclarar quien es David y quien es Goliat.

Irreversible

Nunca será recordado por brindar seguridad bajo los palos. Pero la historia de Ariel Rocha no es sólo la de un mediocre arquero: es la de alguien que por una sola jugada vio cambiar para siempre su destino de futbolista.
El domingo 26 de agosto de 2001 juegan Independiente-Racing en la Doble Visera la edición del clásico por el Apertura de ese año. Partido friccionado, cerrado, chato. Se abre recién a diez minutos del final con el gol de Forlán. Racing sale entonces a matar o morir y empiezan a llover centros en el área de Ariel Rocha, quien hasta ese momento se muestra seguro.
Pero llega el instante fatal. En el minuto 90 Vitalli tira el último centro; Rocha sale confiado, quizás creyendo que descuelga esa pelota y se acababa el partido, por eso temerariamente llega hasta el borde del área grande. Pero falla groseramente el cálculo, la cabeza de Loeschbor le anticipa el puñetazo y es el empate, un punto para cada uno. “Pido perdón a la gente”, dijo después del partido.
La pesadilla de Rocha, hincha y jugador de Independiente, no terminaba: Racing salió campeón ese mismo torneo, luego de más de tres décadas, aventajando a River por un solo punto. Atroz resultado de su error.
Caído en desgracia, Ariel jugó el último partido oficial de su carrera el 20 de febrero de 2002 en la derrota 3-2 frente a Newell´s. A partir de ahí, el ostracismo: borrado por los sucesivos técnicos, durante casi dos años pasó del banco a la Reserva y de allí a entrenarse en soledad, pese a seguir perteneciendo a Independiente. Nadie quería sacarlo del olvido.
En febrero de 2004 recobró notoriedad cuando acusó de corruptos a los dirigentes de Independiente, pero nadie salió a respaldarlo. Luego quedó libre y pasó a Arsenal, donde no jugó oficialmente, y finalmente a comienzos de 2005 decidió retirarse, con poco más de treinta años, una corta edad para un arquero.
No sabemos donde está actualmente, pero probablemente no debe pasar un solo día sin lamentarse de aquella salida en falso.
El destino es usualmente inexorable.

No sé cómo voy, no sé cómo vengo (versión libre)

Sir William se retuerce en su tumba

I don´t know how I go, i don´t know how I come
I only know that i´m here to support you
I can´t explain this feeling
That it´s deep inside me, I can´t stop

C´mon Independiente, everything is gonna be alright
As usual, I´ll follow you
As usual, I´ll support you
C´mon Independiente, let´s gonna win
That the cup I wanna win
And everybody let´s go party
Because the academy (suckers!) doesn´t exist more
Because the academy (suckers!) doesn´t exist more!!!!

El jugador resiliente

Los manuales definen a la resiliencia como "la capacidad de un material para acumular energía de deformación durante el período elástico, y luego volver a su forma original".

Esta definición parece caberle a Víctor Manuel López Narge, uruguayo, que desde su llegada al Rojo en el 98 acumuló presiones, críticas e insultos de todos lados, pero al final siempre volvía a aparecer entre los 11 que jugaban.

Llegó al club de la mano de Menotti y, según dijo, su primer objetivo en "la vidriera de Independiente" era la camiseta n°10, para de ahí pegar el salto a Europa (!). De hecho lo hizo, por España y un tal Uralam Elista de Rusia, antes devolver a su Uruguay natal.

En el club dejó algunos goles y algunos más hichas afónicos (y no de gritar goles).

Otro perro más

Como acá recordamos a los perros que pasaron por Independiente no podía faltar Boneco, un simpático animal que acompañaba al rojo cada vez que salía el equipo allá por los 70.

¿Cuántos bonecos pasaron por el equipo en los últimos años? Hay varios que deberían posar con el banderín entre los dientes.

El heredero

Damián el piojo Manso es un símbolo del rojo de los últimos años. Inolvidable para los hinchas, su zurda supo impactar a las tribunas de la doble visera entre las temporadas 2003-2004. En su primer partido (3-1 contra Estudiantes) la rompió y los hinchas enrojecieron sus palmas y lo nombraron con un título cuasi nobiliario: el heredero del Bocha.

Parecía que había llegado el Mesías. Aquel que, después del retiro del más grande, llevaría al rojo a lo más alto. Aquello que, por distintos motivos, no habían podido lograr ni Garnero, ni Insúa ni tantos otros. La 10 roja, por fin, había encontrado un torso perfecto donde calzarse. Lamentablemente, se tuvo que ir pronto.

El idilio pareció llegar una tarde de fines de 2003 contra Racing, en cancha de la empresa, cuando convirtió el 1-0 . Fue su único gol con la roja. Lamentablemente, el clásico terminó en un pobre y olvidable empate 1-1.

Sin lugar a dudas, si no fuera por los errores del técnico, de los dirigentes, de sus compañeros, de la tribuna, del que vende colgantes en Alsina y Belgrano, de los utileros y del que agita los brazos cuando está por salir el equipo, Mansito nos hubiera llevado directamente a Japón. Seguramente su zurda hubiera mareado a Maldini, Costacurta, Nesta, Cannavaro o cualquier defensor europeo que quisiera marcarlo. Lamentablemente, nos quedamos afuera con Sao Caetano, por penales.

Damián el piojito Manso es un símbolo del rojo de los últimos años.

Lamentablemente.

Memoria e historia: solamente te mandamos a la B.

22 de diciembre de 1983. Giusti marca el primero.

Aunque parezca obvio, memoria e historia no son lo mismo.

Un hombre construye su memoria individual por fragmentos. Atroz sería recordar todo lo que nos sucede o tan sólo retener algunas partes de nuestra vida. Uno tiende a seleccionar algunos aspectos de la memoria: de un episodio memorable de la escuela primaria queda la hojarasca, lo más relevante. Y tal vez el tiempo termine borrando la propia verdad de lo sucedido. Los grupos sociales también tienen su propia memoria, construida en base a símbolos, canciones, recuerdos.

La historia es algo distinto. Se supone que es una disciplina científica, que sigue ciertos parámetros para hallar algún componente de lo realmente sucedido en el pasado. Nadie discute que el 9 de julio de 1816 se declaró la Independencia, pero sí cada historiador lo interpreta con su propia perspectiva.

Memoria e historia se retroalimentan. La primera se nutre de hechos históricos concretos para generar algún tipo de identidad o de referencia. Uno puede no haber vivido la dictadura militar, pero a través del conocimiento histórico se construye la memoria en el rechazo al genocidio. Todos estamos de acuerdo en eso.

¿A qué vamos con esto? A que los adláteres de la divisa roja también construimos nuestra propia memoria. Y uno de los momentos clave es el histórico 22 de diciembre de 1983.

Ese día Independiente ganó 2-0 y salió campeón. No solo eso: su rival era el propio Racing, con las incontables opciones de burlarlo de por vida. Pero aún más: no sólo ganó el campeonato, sino el enemigo había descendido una fecha antes. Entonces, si nos atenemos al hecho histórico, Independiente le ganó a un Racing ya descendido. No lo mandó a la B. Salió campeón el mismo día que Racing jugaba su último partido en primera.

Pero no importa el hecho histórico. En la memoria roja quedó el 22 de diciembre de 1983 como el “día que los mandamos a la B”. Buena parte de la identidad roja, aunque no se lo haya vivido por ser un niño o incluso por no haber nacido siquiera, se construye en base al “te mandamos a la B”. No es “te fuiste a la B”. Es haber mandado al descenso al rival de siempre y el mismo día que se logra un campeonato.

Ninguna hinchada del mundo tiene el privilegio de construir su memoria así.

Y eso nos hace más grandes.

Primer gran alegría roja del año

Tenemos un profesor entre el staff del Blog, Balder, alias ganzua se acaba de enterar que ya está recibido.
Felicitaciones, y esta es una prueba más del poder esotérico (era asi?) del PT.

Inicio de Todos los Rojos

Nació no por casualidad, cuando el Rojo más nos necesitaba, como dice el grito de la hinchada "en las buenas, y en las malas mucho más".

La idea del blog es poder compartir temas relacionados con Independiente, el orgullo nacional.

Como primer idea surgió la de compartir datos de los jugadores que pasaron por el rojo en las últimas decadas.
Esto sirve para dos cosas, una para no olvidar a los grandes y poder realizarles un grato homenaje, y segundo para poder sacarnos la bronca por la cantidad de muertos de hambre que vinieron a robar a Independiente.

No vamos a dar nombres por el momento, ya van a venir.

Gato, Manu, Juanjo